Las fiestas en barco son una variedad de despedida de solteros a las que no estamos acostumbrados. Y es precisamente el marco en el que se realizan, lo que les da ese toque distinto. Podría anclarse la embarcación en la orilla de la playa o en un muelle, y hacer una recepción normal, pero esa sería la idea más alejada de lo que representan.
Si los novios y sus amigos quieren disfrutar por todo lo alto tan magno acontecimiento, pueden alquilar una nave que ya ha sido acondicionada para estas celebraciones, y deleitarse juntos sin estar pendientes ni de la logística, ni del mantenimiento.
Tarragona y su perfecta ubicación en la Costa Dorada, un clima benévolo y modernas instalaciones, le permitirán escoger cuándo embarcarse para extasiarse en una festividad espectacular, en medio de un ambiente familiar de sana camaradería. No olvidando el agradable chapuzón, lejos de las playas colmadas de turistas, que los invitados podrán darse.
Despedidas de solteros en el mar
En los espacios costaneros de Tarragona se ha desarrollado una importante infraestructura que, unida a aquellas empresas encargadas de todo lo necesario para que su fiesta sea un rotundo éxito, le ofrecen entretenidas aventuras. Personal avezado en la labor marina junto con los encargados de las actividades de recreación, navegarán en áreas cercanas al litoral durante el día o la noche.
Así, un lujoso barco bien equipado se convierte en una gran superficie de festejos que se desplaza en el Mediterráneo, permitiéndole celebrar con motivos alegóricos en los magníficos salones, admirar el horizonte iluminado de la metrópolis desde la cubierta, bailar y complacerse con sus bebidas favoritas o contemplar la iridiscencia de la luna llena reflejada en las olas del mar.
Independientemente de que viva en la ciudad o se sienta atraído por su belleza, llévese el mejor recuerdo que pueda coleccionar y haga de la fiesta en el barco, la más fantástica despedida de solteros. Esta será una razón de grata memoria que le invitará a revivirlo en la próxima oportunidad que tenga disponible, ya sea festejando por otra causa o porque alguna de sus amistades, con entusiasmo haya decidido imitarle.