El sector de la construcción es uno de los más afectados por la pandemia. La flexibilización de la cuarentena, ha permitido la reactivación de las actividades y no hay tiempo que perder. Sin embargo, la emergencia sanitaria continúa y por eso, al desempeñar tareas tales como la operación de grúas, es primordial aplicar intensas medidas de seguridad.
Pero, en el panorama actual, donde la amenaza no es una colisión o una caída, sino el contagio de un virus que puede llegar a ser mortal, las condiciones son diferentes. En este caso, las normas a aplicar son de tipo sanitario y no deben ser ignoradas ni flexibilizadas.
Entre ellas destaca con particular importancia la desinfección del área de trabajo. Dicha recomendación es aplicable a todos los trabajadores de la construcción y, en el caso de las grúas, esta se pone en práctica sobre el vehículo.
Ahora bien, es indispensable tener en cuenta que no se trata de remover el polvo sino de eliminar cualquier rastro de bacterias transmisoras del coronavirus. En el vídeo que se muestra a continuación, puede apreciarse el modo correcto de hacerlo.
A este proceso lo antecede la propia desinfección personal, la cual ha de realizarse en casa utilizando productos idóneos para ello. Dicho protocolo debe repetirse al retornar al hogar, a fin de evitar contagiar a las personas con las que se convive.
A esto se suma, como medida de gran relevancia, la prohibición de subir pasajeros o acompañantes a la grúa. Debe garantizarse el distanciamiento con otras personas, especialmente si no se tiene constancia de que ha cumplido con los protocolos de desinfección personal. Por lo demás, el operador deberá añadir a sus elementos de protección habituales, los guantes y el cubrebocas.
Estrategias de planificación de proyectos durante la pandemia
El desarrollo de las actividades en la construcción está caracterizado por la planificación y constante revisión de los proyectos diseñados. Ello implica la realización de reuniones que son de interés para los operadores de grúas y el resto de los miembros del equipo.
Dadas las circunstancias, la realización de dichas reuniones en las condiciones habituales representaría un riesgo para los presentes. Por eso, la recomendación más idónea, es llevarlas a cabo de manera virtual. De esta forma, cada miembro del equipo puede mantenerse resguardo en su hogar y evitar el contacto con personas u objetos que puedan estar contaminados.
Ciertamente, no se trata de la normalidad esperada, pero en vista de las circunstancias y dada la urgencia por reactivar las actividades, es preciso seguir tales recomendaciones. Siguiéndolas, el sector de la construcción podrá reactivarse y superar las consecuencias de los meses de paralización.
